La leyenda del caballo dorado. Hace muchos años atrás, en una pequeña aldea en lo alto de las montañas de China, vivía un campesino llamado Lin. Lin era un hombre trabajador y valiente, sin embargo, su mayor ambición era poder tener un caballo dorado, uno que pudiera ayudarle en su tarea diaria de trabajar en la tierra y que además despertara la admiración de los demás aldeanos.
Lin trabajaba arduamente día tras día en su campo y ahorraba todo lo que podía con la esperanza de algún día poder comprarse un caballo. Sin embargo, con el poco dinero que ganaba, no lograba hacer realidad su sueño. Sus vecinos lo criticaban por su obsesión por el caballo dorado, y le decían que su ambición era una verdadera locura.
Un día, mientras trabajaba en su campo, Lin encontró una moneda dorada en la tierra. A pesar de que era una simple moneda, Lin sintió que había encontrado un verdadero tesoro, y con el dinero que había ahorrado sumado a la moneda dorada, por fin pudo comprar un caballo.
Lin estaba emocionado de tener su propio caballo, sin embargo, su felicidad fue efímera cuando se dio cuenta de que no era un caballo dorado como el de sus fantasías. A pesar de ello, Lin estaba agradecido por tener un animal que le ayudara en su trabajo, y lo cuidaba con mucho cariño.
Un día, cuando Lin estaba trabajando en su campo, se encontró con un anciano que estaba caminando hacia su casa. El anciano se detuvo a conversar con Lin y le preguntó acerca de su caballo. Lin le contó toda la historia de su búsqueda por un caballo dorado, así como también de la gran sorpresa que se llevó cuando encontró a su caballo.
El anciano escuchó atentamente, y luego le dijo a Lin que si realmente estaba buscando un caballo dorado, debía subir la montaña, caminar hacia el Este y encontrar un templo sagrado. El anciano le dijo a Lin que dentro de dicho templo encontraría un caballo que podría llevarlo a todo lo que había soñado.
Lin se emocionó ante la posibilidad de encontrar finalmente su caballo dorado, y siguió las instrucciones del anciano. Después de caminar durante horas, llegó al templo y encontró un hermoso caballo dorado, que era perfecto en cada uno de los detalles.
Lin se sintió abrumado por la belleza del animal y lo tomó en sus brazos. De pronto, se dio cuenta de que, en lugar de estar en sus brazos, estaba montando al caballo dorado. El caballo comenzó a correr alrededor del templo, y Lin sintió que volaba por el aire.
De pronto, el caballo dorado empezó a hablar y le dijo a Lin que lo llevaría a cualquier lugar que deseara, pero que si lo maltrataba, perdería su poder y su belleza. Lin prometió cuidarlo con todo su amor, y el caballo dorado se convirtió en su fiel compañero.
Desde ese día, Lin y su caballo dorado trabajaron en el campo juntos, y la aldea entera quedó impresionada por la belleza y destreza del animal. Los vecinos de Lin se acercaron a él, para pedir su ayuda en sus propias tareas agrícolas, y Lin se convirtió en un líder valorado y querido por su comunidad.
Con su caballo dorado, Lin también fue capaz de ayudar a proteger a la aldea de los ataques de los bandidos que a menudo llegaban a robar y hacer daño. Lin y su caballo dorado lucharon juntos contra los problemas que acechaban a la aldea, y gracias a su valentía y compromiso, consiguieron mantener a salvo a su comunidad.
Con el tiempo, Lin se convirtió en un anciano sabio, y su historia de la búsqueda del caballo dorado se convirtió en una leyenda en la aldea. Contaban que, gracias a su perseverancia y compromiso, pudo encontrar la felicidad y seguir ayudando a su comunidad.
La leyenda del caballo dorado y de la perseverancia de Lin se convirtió en una inspiración para muchos en la aldea, y la gente seguía recordando su historia con amor y gratitud por mucho tiempo después.
Y así, gracias a la amistad y el compromiso entre Lin y su caballo dorado, la aldea encontró la felicidad y la paz.
