El Monstruo del Pueblo del Olvido

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El Monstruo del Pueblo del Olvido
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El Monstruo del Pueblo del Olvido. Érase una vez un pequeño pueblo llamado Olvido, situado en lo más profundo del bosque. Un lugar tranquilo donde todos los habitantes se conocían y se llevaban bien. Sin embargo, en el pueblo, corría un rumor escalofriante: había un monstruo que se escondía en la oscuridad de la noche y acechaba a los niños que no seguían las normas.

Los habitantes del pueblo eran muy supersticiosos y temían a cualquier cosa que no pudieran explicar. No se atrevían a salir de sus casas por la noche por miedo a encontrarse con el Monstruo del Pueblo del Olvido. Este misterioso monstruo era tema de conversación en todas las reuniones de los habitantes del lugar.

Un día, un niño pequeño decidió investigar y encontrar al monstruo. Él creía que no era nada más que una leyenda y quería probar que todos los demás estaban equivocados. Así que, aquella noche, mientras todos los demás estaban durmiendo, se escapó de su casa con una linterna y un poco de pan, dispuesto a enfrentarse al Monstruo del Pueblo del Olvido.

Entró en el bosque, caminando con cautela, y se internó en la oscuridad de la noche. Hasta que, de repente, un ruido muy extraño le hizo detenerse. Era como si alguien lo estuviera siguiendo. Se dio vuelta y no vio nada, hasta que se volvió de nuevo y se topó con un gran monstruo de aspecto aterrador.

El niño se paralizó de miedo al instante. El Monstruo del Pueblo del Olvido lo miró fijamente con sus grandes ojos amarillos. El niño se preguntó por un momento por qué el monstruo lo estaba mirando de esa manera. Pero en un instante, el monstruo gruñó y el niño salió corriendo en la dirección del pueblo, experimentando la sensación más desagradable de su corta vida.

Cuando llegó a su casa, se metió en la cama de inmediato y cubrió su cabeza para tratar de dormir. Pero no podía quitar de su mente la horrible experiencia que había tenido esa noche. Se preguntaba una y otra vez cómo escapó con vida después de haber visto a un monstruo real y vivo.

Al día siguiente, el niño no podía evitar contarle a sus amigos y familiares lo que había sucedido en el bosque. Pero nadie le creyó, dejando al niño solo en la oscuridad de sus dudas y miedos.

Los días siguieron pasando y el niño no se atrevía a salir de casa por la noche, a menos que fuera necesario. Pese a ello, seguía pensando en el monstruo. Había algo en sus ojos que lo había dejado intrigado y asustado. No podía entender por qué el Monstruo del Pueblo del Olvido lo había dejado escapar.

Una noche, el niño decidió enfrentarse de nuevo al monstruo. Esta vez, iría preparado. Sabía que el monstruo no podía hacerle daño, pero aún así tenía miedo. Así que, de nuevo, salió de casa con una linterna, un poco de pan y una granada en su bolsillo.

Caminó hacia el bosque y se adentró en la oscuridad de la noche. Mientras se acercaba al lugar donde había visto al monstruo la vez anterior, su corazón comenzó a latir con fuerza y sus piernas empezaron a temblar. Ahora podía ver al monstruo de cerca. Era incluso más grande y más aterrador de lo que recordaba. Pero, a pesar de sus miedos, sacó su granada de su bolsillo y la lanzó al monstruo.

La granada explotó con fuerza, y el monstruo cayó al suelo. El niño se acercó y descubrió que había una llave en las manos del monstruo. Decidió cogerla para investigar a dónde conducía.

Corrió de vuelta al pueblo, y allí descubrió que la llave abría la puerta de una casa que estaba en las afueras del pueblo, un lugar en el que los habitantes no entraban desde hacía muchos años.

El niño decidió aventurarse en la casa y cuando entró, se sintió muy extraño. Había algo que no estaba bien. El suelo estaba húmedo y el ambiente olía a moho. Sin embargo, continuó explorando la casa, hasta que encontró a un anciano, quien le preguntó cómo había llegado allí. El niño le mostró la llave que le había arrebatado al Monstruo del Pueblo del Olvido y el anciano no pudo creerlo.

Entonces, el anciano le contó la verdadera historia detrás del monstruo. Él había sido el propietario de la casa, pero después de una pelea con el pueblo, había sido rechazado y exiliado. Desde entonces, había visitado regularmente el pueblo en busca de comida y compañía. Pero nadie, a excepción de los niños, querían acercársele.

En un intento de asustar a los niños para que no lo expulsaran del pueblo, el anciano había inventado al Monstruo del Pueblo del Olvido. Pero en realidad, no era más que una persona solitaria.

El niño comprendió que, aunque el anciano había actuado mal, era sólo por culpa de su soledad, por lo que decidió traerlo de vuelta al pueblo y pedir a los habitantes que le dieran otra oportunidad. Con el tiempo, el anciano encontró amigos y compañeros, y el Monstruo del Pueblo del Olvido pasó a ser simplemente una leyenda más del lugar.

Y así, el niño aprendió que a menudo lo desconocido y lo que cause miedo es en realidad algo que uno no debería temer, sino comprender. Así que, a partir de aquel día, el Monstruo del Pueblo del Olvido pasó a ser simplemente uno más de los muchos personajes que habitaban en el pueblo.

Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
El Monstruo del Pueblo del Olvido
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