El Príncipe en el Reino del Olvido

Tiempo de lectura: 4 minutos

El Príncipe en el Reino del Olvido
¿PREFIERES UN AUDIOCUENTO?

Si prefieres, puedes escuchar el cuento mientras haces otras tareas

El Príncipe en el Reino del Olvido. Érase una vez un príncipe que vivía en un hermoso reino lleno de vida y color. El príncipe era conocido por su memoria increíble, podía recordar cada nombre, fecha y detalle que se le presentase. Un día, el príncipe decidió salir a dar un paseo por el bosque cercano a su castillo, pero mientras caminaba se topó con una extraña niebla que comenzó a cubrir todo su alrededor. Al poco tiempo, el príncipe se dio cuenta de que había llegado a un reino desconocido, y por más que intentaba recordar sus propias memorias, olvidaba cada vez más.

El príncipe se adentró en este nuevo reino del olvido, donde las cosas no eran como acostumbraba a verlas. Los árboles no tenían hojas, los ríos parecían no moverse y las flores no tenían color alguno. Todo parecía en blanco y negro, y el olvido daba la sensación de estar en el aire.

El príncipe empezó a caminar, sin saber a dónde iba, triste y confundido porque no podía recordar nada de lo que había vivido antes de llegar a este lugar. En su búsqueda, encontró un anciano sabio que, con su bastón mágico, le dijo: “Príncipe, has llegado al Reino del Olvido. Un lugar donde todo lo que se recuerda se olvida. Pero, no todo está perdido, si te concentras tanto puedes encontrar la forma de salir de aquí.”

El príncipe, desesperado por encontrar una solución, le preguntó al anciano sabio qué debía hacer para poder volver a su reino, el anciano sabio respondió: “Debes encontrar la flor de la memoria. Una vez que la tengas en tus manos, podrás recordar todo lo que pensaste haber olvidado.”

Desde ese momento, el príncipe decidió poner todo su empeño en encontrar la flor de la memoria. Así empezó a buscar por todos los lugares, ríos y montañas del reino del olvido, subió y bajó cumbres, caminó bajo la lluvia y el sol inclemente. Pero, a pesar de su gran esfuerzo, no lograba recordar nada de su anterior vida.

Un día, el príncipe conoció a una anciana que vivía en una de las montañas más altas del reino. Esta mujer, muy curiosa, le preguntó al príncipe qué había hecho en su vida antes de haber llegado a ese lugar. El príncipe, sin poder recordar nada, le pidió ayuda para encontrar la flor de la memoria.

La anciana le contó al príncipe que la flor de la memoria se encontraba en una montaña muy alta, y que para llegar hasta ella debía seguir una serie de indicaciones. La anciana le entregó al príncipe una caja de madera en la que había un mapa que lo conduciría hasta la montaña donde se encontraba la flor de la memoria. Así, el príncipe decidió seguir las indicaciones de la anciana, y empezó a ascender por la montaña.

La subida no fue fácil, el trayecto estaba lleno de obstáculos y tenía que sortearlos cada vez que aparecían. Pero, decidido a encontrar la flor de la memoria, no se rindió, y llegó a la cima de la montaña.

Allí encontró la flor que andaba buscando, un hermoso nenúfar blanco y brillante, que parecía titilar en su mágico brillo. El príncipe, sin dudar, la cogió y el recuerdo brotó en su mente como manantial. Vió los rostros de sus seres queridos: su madre, su padre, sus amigos, los sitios que había visitado, sus juegos más preferidos, hasta sus travesuras de niño.

Con la flor en sus manos, el príncipe volvió al lugar donde había encontrado al anciano sabio y le enseñó la flor. Con esta flor, recuperó todas sus memorias y, agradecido, decidió compartir las flores de la memoria con los habitantes del reino del olvido.

En el acto, todo volvió a su ser, los árboles volvieron a tener hojas, los ríos a avanzar y las flores adquirieron hermosos colores.

Desde ese día, el príncipe nunca volvió a olvidar, y siempre recordó la extraordinaria aventura que había vivido en el reino del olvido. Comprendió que las experiencias y los recuerdos son lo que nos hace quienes somos, y que los olvidos pueden extinguir y opacar algo tan valioso como es nuestra memoria.

Y colorín colorado, este cuento sobre el recuerdo y la memoria, ha terminado.

Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
El Príncipe en el Reino del Olvido
¿Te ha gustado «El Príncipe en el Reino del Olvido»?
¡Compártelo con tus amigos!
Facebook
Twitter
Pinterest
WhatsApp
Email
Imprimir